Acabo de terminar este libro y me dejó con la boca abierta después de tantos giros argumentales, identidades suplantadas y filosofías de vida un tanto difíciles de entender. Ninguna historia me había sorprendido tanto como Amphitryon lo hizo, además fue muy interesante cómo cada parte (en las que se divide la novela) se unen hasta formar el laberinto completo.
El tema de la guerra mundial es uno que, en lo personal, llama mucho mi atención. Y creo que esta novela me va a dar un empujoncito a leer e investigar más sobre el conflicto bélico.
Me gustó la manera en que está escrito el libro, predomina mucho la narración y eso ayudó a que me adentrara en la trama. Al principio me pareció un poco pesada, mientras leía tuve que tomarme descansos de al menos 5 minutos para distraerme un poquito, después de eso sentía que leía mucho mejor. A esto le agrego que el autor usa una narrativa compleja, con lenguaje que no suele ser tan común, sin embargo me pareció perfecto para avanzar con lecturas que son más "difíciles" a comparación de las que acostumbro leer.
«A nosotros sólo nos toca allanar el sendero que conduce irremediablemente a la destrucción de lo sagrado y hacernos a la idea de que no hay lugar para la poesía en la triste zona del universo en que hemos sido recluidos».
Now, I really liked this book, but if Padilla is supposed to be representing the rediscovery of Latin American magic realism with his Crack group then I think some fairly important things are missing in the text. Magic things. The text works really well in terms of postmodernism - the fluidity of identities and complex weaving of characters gradually build into a quasi-revelation about the function of names and the multiplicity of worlds. It left me considering the network of relationships in the text, and thinking that performativity isn't enough to establish identity. Eventually, it doesn't seem to matter which physical person is occupying Dreyer's shoes because the name brings with it its own relationships with other people and other names that lay over the existing network like an acetate sheet adding detail to a diagram. You begin to see the independence of names and reputations, and whilst they may share the same space as the (original? replacement?) body they are seperate entities. I did like the historical twist he plays in the coda: not quite fictionalising history, not quite rewriting it. He creates a narrative which takes the 'verifiable facts' such as the photograph as a departure point, and then pushes it to the brink of absurdity with the identity-swapping whilst still remaining in the realms of the possible. Its almost like an exposure of history textbooks and the way in which they write (with all the connotations of motive, bias, creativity), rather than record, history. I did get the distinct impression he was joining people like Rushdie under the banner of historiographic metafiction. Still, awesome as it was, I do feel a little betrayed by the fact I was anticipating magic realism. I know I should have expected it since this week we're doing 'the death of magic realism', but even so...... Maybe I'm just not getting it :p
What does it say about me that I found it so difficult to remain engaged with this novel? It's interesting; the writing is wonderful. Perhaps it is because there are so few scenes - it's mostly description.
Totalmente sorprendente, Amphitryon, es una de esas novelas de las que no esperas nada pero que te sorprenden gratamente, gracias a una gran calidad y una trama original que no puedes dejar de leer en momento alguno.
No conocía a Ignacio Padilla, autor de esta portentosa novela, pese a ser bastante conocido en Latinoamérica. Padilla me resulta un gran escritor con un estilo muy depurado y elegante, aunque en ocasiones un poco rebuscado. Cuenta con una prosa equilibrada y un poco enrevesada, un lenguaje refinado y muy bien escogido que le da a todo el texto un punto lírico muy bello, y unas descripciones bastante parcas aunque muy concisas y explicativas. De los personajes poco se puede decir. Todo el libro está diseñado de tal forma que siempre se juega al embuste con las identidades. Este juego te cuesta un poco pillarlo pero cuando lo haces te das cuenta de que está tan bien hecho que los personajes están construidos como los impostores que dicen ser. Así que los conoces muy poco y de lo que sabes, no te puedes acabar fiando al 100%.
La historia que narra Amphitryon es excesivamente compleja pero a la vez de una simpleza arrolladora. Contada como cuatro historias que se relacionan entre sí a lo largo del tiempo y el espacio, el principal nexo de unión es el de la suplantación de identidad. Es decir, adoptar la identidad de otra persona como forma de vida, medio de sobrevivir o simplemente por venganza. Así que a lo largo de cada una de las tramas nos encontramos diversos personajes que nos narran como tomaron otra identidad o que fueron víctimas directa o indirectamente de esa suplantación. Así conocemos al hijo de un funcionario ferroviario que busca venganza, un joven seminarista que en el frente de la Primera Guerra Mundial toma una decisión drástica, un joven oficial cuyos fantasmas del pasado le llevan a maquinar un plan que destrozará muchos destinos además del suyo y, un escritor inglés víctima de una enorme confabulación para salvar los restos del aparato nazi. Cada una de estas tramas nos desvela un pedacito de la historia principal. Pero también nos reta a plantearnos la cuestión de la identidad propia y la eterna lucha entre el individualismo y el colectivismo. Y es que, a través de esta historia, el autor nos demuestra que el destino de cada uno no tiene por que estar siempre en nuestras manos. Algo que invita a la reflexión y al estupor, así como al horror más absoluto.
En suma, Amphitryon es una obra magnífica que, para sorpresa general, está basada en hechos reales, lo que la hace todavía más escalofriante. Y es que esta novela nos presenta el reto que supone confiar en que la persona que tenemos delante sea quien dice ser. Algo que es de suma importancia sobre todo en situaciones en que la vida de millones de personas está en juego.
La leí un par de veces por gusto y para entender qué estaba pasando. Un gran novela de intriga, que extiende el goce de La muerte y la brújula. Es un juego literario, un enigma hecho de prosa barroca e hipnótica.
Un libro que se deja querer, quieres más de esta intriga más de una persona que está dispuesto a jugarse la vida por qué la suya perdió valor ... buenísimo