Tas bija kā adrenalīna pilns piedzīvojums- ieskats vienas nenobriedušas personības straujā pārmaiņu procesā. Gada laikā kļūt par multimiljonāru, apdedzināties un pieaugt. Dzīves svarīgākā mācība, kas atstāj neizdzēšamas pēdas uz visu atlikušo mūžu.
Sāku saskatīt līdzības Grišama grāmatās. Pārspīlēti ambiciozi juristi tiek izsūtīti trimdā, cietumā vai nabadzībā.

This is one of those books I can't stop thinking about! I read it for a business law class I'm taking and it is great!

Clay Carter is working for Washington D.C.'s Public Defense Office when he is given a murder case. The murderer is a young, black man and Clay assumes it's a typical murder case. Then, he is approached by Max Pace, an agent for a pharmaceutical company. Max explains a bigger case behind the murder: the murderer was taking pills, the side effects made him unusually violent. Max hired Clay to settle the potential lawsuits, quietly and outside of court. In return, Clay would be paid well.

When that case is successful, Max gives Clay another case, which results in large attorney fees for Clay. He begins to catch public attention, winning cases with large amounts of clients and large amounts of attorneys--mass tort law. Clay begins spending his money: new house, boat, plane, money to pay his co-workers well. He tries not to get caught up with the game of sueing, but eventually it comes back to bit him in the butt.

Tort law is especially fascinating and this book does a great job at giving a human story for the lawyers who are behind it. Clay doesn't want to be the greedy and selfish lawyer, but he gets so caught up in the hype, he can't help himself. He wants to remain a good and ethical lawyer, but it is a slippery slope. This is a very Grisham style book and I would recommend it to anyone who likes that genre.

Another good Grisham novel that is very similar to "Litigators."

Took a while to get into as quite a complex read and not really a flowing read for me hence minus one star

This was a great look at the world of mass tort litigation has only John Grisham can do. I really enjoy the story in this as it was literally a rag to riches story about a public defender who learned some info about a pharmaceutical company, and strikes it big with a massive lawsuit and the eventually downfall when things don’t go his way. Overall, great story and memorable characters left me wanting more. Would love to see a sequel.

Clay Carter has been in the Public Defenders office too long and like most of his colleagues dreams of a better job in a real law firm. When Clay reluctantly takes the case of a young man charged in a random street killing he thinks it's going to be another of the senseless murders that happen in Washington D.C. every week. After Clay starts digging into the background of his client he stumbles on a conspiracy too horrible to believe and suddenly finds himself in the middle of a complex case against one of the biggest pharmaceutical companies in the world with the kind of enormous settlement that could change his life and that would almost overnight make him the legal profession's newest king of torts. Like father like son which made this too predictable almost from the start. Not John Grisham at his best.

Le pondría menos nota. Debería. Quizá lo haga. Tal vez no se lo merezca, pero mi nivel de frustración actual me dice que le ponga dos estrellas. *aleja la mano del pad de la notebook*
n  Edit: le puse dos estrellas nomás.n

Spoilers!! Porque estoy enojada como para marcarlos.

La cuestión, claramente acabo de leer un libro de FANTASÍA porque JAMÁS le pasaría esto a un abogado tan corriente como a Clay. Me reía de los escandalosos números que manejaba este hombre. Claro, nadie quiere leer sobre un defensor público que intenta bajarle la pena al gil que le robó a la mujer en la esquina. Mejor hablemos de pleitos que nunca vemos plasmados y de números exorbitantes, jets privados, ex parejas y abogados caretas cuyos nombres me parecían muy racistas.

La historia es muy meh, es desaforadamente cliché y es asquerosamente predecible. Faltándome 150 páginas, adiviné todo el final y se lo hice saber a mi madre (¡tengo testigos!). Realmente no sé cómo Grisham logró escribir casi 400 páginas de algo que es muy chato, con tan poca profundidad tanto en la historia como en sus personajes. Es la versión en masculino de El diablo viste a la moda, solo que en vez de vestidos y revistas acá había jets y viajes a lugares paradisíacos.

La narración de Grisham carece de emoción. El personaje hizo esto, vio a tal persona, dijo tal cosa, y se fue a dormir. Ah, de vez en cuando piensa en su ex. Oh, sí, cuán romántico, estos Romeo y Julieta hacen que mi corazón se enternezca -----> of course not.
Lo triste es que empezó muy bien. Clay fue designado a un caso que parecía prometedor: un chico con un pasado de drogadicto y que hacía meses que estaba limpio, de la nada va y mata a un civil con el que apenas siquiera tenía relación, por ninguna razón aparente. Interesante, ¿qué podría haber llevado a este chico a cometer tal delito? ¡Descubrámoslo! ¡Pero de la manera más aburrida posible! ¡Y solo 30 páginas después de empezar la historia así, cambiemos el ambiente totalmente! ¡Clay, no vas a defender a pobres diablos nunca más, ven al mundo de los pleitos y los abogados con dinero que esta es la tuya! Y el hijo de puta va. Sí, se va. Abandona el caso interesante por la rutina de pleitos más aburrida de la historia.

El libro peca de ser repetitivo, de no tener un clímax, porque en cada capítulo hay una compañía de droga diferente a la cual hacer entrar en bancarrota y sabés que todas van a caer porque sí, because reasons. Y los abogados discuten y discuten sobre casos y números y gente que uno nunca llega a conocer, y Clay solo exaspera y exaspera, y se pelea con la novia, y empieza a ganar mucha plata, millones, billones de dólares, y de repente tiene trajes nuevos, jets nuevos, viaja constantemente a hoteles lujosos, restaurantes de cinco estrellas, y sí, se le sube a la cabeza. Esta historia del pibe con una vida modesta que de pronto gana plata de a montones y encima se vuelve engreído, ya la vi incontables veces antes. Y ya sé cómo termina. Un caso le va a salir mal, va a perderlo todo, se va a dar cuenta de que la plata no hace a la felicidad, vuelve a su antigua vida (y obvio que la novia regresa, no hay duda de ello).

Muy pobre carta de presentación de Grisham. Definitivamente escogí empezar a leerlo con uno de sus peores libros.

Una historia totalmente predecible. No he logrado conectar con ninguno de los personajes en ningún momento y el hecho de saber cómo iba a actuar todo el mundo todo el rato lo ha hecho todavía peor.

La abundancia de menciones al dinero, tanto de las cifras que se manejaban como de la perspectiva de ganarlo o perderlo hacen que todo parezca frívolo, sin más. Supongo que esa era la intención del autor, pero a mí solo hacía aburrirme y perderme entre miles de millones de menciones a miles de millones de dólares.

Como crítica al sistema de justicia estadounidense me parece aceptable e incluso razonable el machaque y derribe a todas las figuras del sistema. Sin embargo, no se muestran todas las caras de la moneda, lo que quizás en mi desconocimiento pueda ser ignorancia, pero resulta poco realista.

No puedo recomendar la lectura, ya que no creo que aporte nada nuevo a quien la lea con ganas de una historia interesante sobre un tal "Rey de los pleitos".

P.D.: El machismo y el racismo brillan en todo su esplendor, pero eso creo que ya os lo podíais imaginar.

El libro esta muy bien hasta la mitad de la historia y luego se transforma en una gran decepción.

El protagonista es un abogado que de repente se ve ante la posibilidad de ganar mucha cantidad de dinero y obviamente la toma. En un principio su personaje es retratado perfectamente, era tan interesante leer como su concepto de lo que es moral o no,va cambiando y como sus prioridades cambian al verse expuesto a este grupo de gente tan adinerada y derrochadora. Un ejemplo perfecto de su cambio de mentalidad es su idea de los jet privados,era un cambio tan sutil y constante que aunque no me agradara el protagonista estaba sumergida completamente en su mente.

Y luego la segunda mitad del libro vino y lo arruinó todo, no puedo siquiera pensar en como el autor pudo tirar por la borda lo que había escrito hasta ahora,es como si se hubiese aburrido de escribir el libro y quisiera terminarlo lo más rápido posible, sin preocuparse por los personajes,la trama ni nada.

Básicamente este libro no tiene final,todo el crecimiento del personaje se detiene y de repente volvemos al principio del libro sin ninguna clase de explicación.
Decepción,decepción,decepción. El libro prometía pero quedo en nada.

OMG are you kidding me? The main character in this book is not likeable in the least. He made some pretty moronic choices that even I (no expert in law or investing) could see as potential disasters. He deserved the fate he got in the end, including living with a shallow, selfish woman who actually dumped him in the beginning of the book because her daddy told her to and only came sniffing around again when he made it big! How could he take her back? He didn't even give Ridley a chance to see if she'd stay with him without the money. Sure, she spent money a lot, but he encouraged her to do so and she got used to it. She would probably have understood if he tried to explain things to her.

John Grisham is a great author. And this book is well written. I just hate the characters of Clay Carter and Rebecca, not the writing.

I used to read Grisham many years ago when I first started out buying / renting fiction. After awhile, though, I moved on to other more 'serious' and literary fiction writers. These days, though, Grisham (and the likes of Crichton and Ludlum) have a less than stellar rep - easy, feel-good reads pandering more to the casual reader needing a distraction at the airport bookstore.

But I've always loved Grisham. He knows how to tell a compelling story, that doesn't need you to concentrate to follow the many characters or convoluted storylines.


Maybe I should check out the second-hand bookstores for more old Grishams.

Dinero, demandas, compañías farmacéuticas y el ascenso a lo más alto de un abogado de poca monta. Con estos ingredientes John Grisham vuelve a preparar uno de esos thrillers judiciales a los que nos tiene acostumbrado.
Tengo predilección por este tipo de tramas, pero reconozco que el desenlace me dejó un poco frío. 3,51 estrellas( redondeadas a 4).