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No he disfrutado de esta novela.
Hasta el desenlace, no he sentido la emoción que me ha faltado a lo largo de la lectura.
A pesar del lenguaje sencillo y exquisito, lo que el autor quiere transmitir no me ha llegado del todo hasta el final. Me parece un relato calculado y frío. A lo largo de la lectura, no he sentido la emoción que podría haber sentido si la historia hubiese sido contada de otra manera. Está todo relatado de manera distante y como si el protagonista, a través de lo vivido, estuviera contando la experiencia de otra persona. En la primera mitad, en la que el protagonista adolescente habla de su historia de amor con una mujer mucho mayor que él, hay algo de sentimiento y obsesión por ella, pero falta mucha emoción. Es todo muy gris y monótono, para mi gusto. Ella es distante y extraña.
Es en la parte final cuando se descubren verdaderamente los sentimientos de los dos protagonistas.Y ese cierre de la historia es impactante y da mucho que pensar. Aquí sí hay emoción.
Puede pensarse que ese es el verdadero valor de la novela, es decir, presentar los personajes con sus luces y sombras, para que, cuando se llega al final, descubrir el mundo interior que han estado guardando para sí mismos.
Esa emoción final eleva la novela, pero hasta entonces no la he disfrutado.
En todo caso, el autor escribe de maravilla!
Hasta el desenlace, no he sentido la emoción que me ha faltado a lo largo de la lectura.
A pesar del lenguaje sencillo y exquisito, lo que el autor quiere transmitir no me ha llegado del todo hasta el final. Me parece un relato calculado y frío. A lo largo de la lectura, no he sentido la emoción que podría haber sentido si la historia hubiese sido contada de otra manera. Está todo relatado de manera distante y como si el protagonista, a través de lo vivido, estuviera contando la experiencia de otra persona. En la primera mitad, en la que el protagonista adolescente habla de su historia de amor con una mujer mucho mayor que él, hay algo de sentimiento y obsesión por ella, pero falta mucha emoción. Es todo muy gris y monótono, para mi gusto. Ella es distante y extraña.
Es en la parte final cuando se descubren verdaderamente los sentimientos de los dos protagonistas.Y ese cierre de la historia es impactante y da mucho que pensar. Aquí sí hay emoción.
Puede pensarse que ese es el verdadero valor de la novela, es decir, presentar los personajes con sus luces y sombras, para que, cuando se llega al final, descubrir el mundo interior que han estado guardando para sí mismos.
Esa emoción final eleva la novela, pero hasta entonces no la he disfrutado.
En todo caso, el autor escribe de maravilla!