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3,5/5
Edward Morgan Forster, novelista británico que nació a finales del siglo XIX, famoso entre otras, por la obra de la que os hablaré a continuación y que fue publicada en 1908, abordaba con valentía una narración que denunciaba la hipocresía de la sociedad y las diferencias entre clases tal y cómo se ve reflejado en «Una habitación con vistas».
La historia nos presenta a Lucy, una joven que sigue lo convencional, las normas y la típica moral inglesa de la época. Junto a su prima emprenderán un viaje a Florencia, allí se hospedarán en una pensión donde conocerán a varios ingleses. Entre ellos, los Emerson, padre e hijo criticados por sus ideales avanzados y su manera de mostrarse de cara a la sociedad. Nuestra protagonista, quedará embelesada a la par que fascinada con la diferente perspectiva que se abre ante sus ojos.
La obra tiene partes muy interesantes, su comienzo resulta encantador, una serie de diálogos amenos, una presentación excepcional de la ambientación y de los personajes y posee una crítica afilada y ridiculizante a los ideales de la época, realmente maravillosa. Pero en su segunda parte, situada ya en Inglaterra, la trama cobra un matiz distinto, más lento y que contiene situaciones inverosímiles y que nos brinda un final romántico que puede resultar absurdo, en desacuerdo con lo presentado con anterioridad.
Lo mejor de la novela sin duda son las reflexiones del personaje de Emerson en contrapunto con Cecil, en las que señala sin pudor la fe irracional y sobre todo muestra su rechazo hacia las ideas conservadoras hacia la mujer. Su modo de ver la vida, es una muestra de la incomodidad que sentía el autor, un claro mensaje de empoderamiento y liberación femenina.
En conclusión, y tras mucha reflexión, debo decir que la novela me ha gustado, ha sido un acierto leerla en este período lector en el que necesito historias cortas y que no supongan mucha dificultad lectora; pero, porque siempre hay un pero, siento que me ha decepcionado en algunos puntos que resultan cruciales para hacer de esta, una historia redonda.
Edward Morgan Forster, novelista británico que nació a finales del siglo XIX, famoso entre otras, por la obra de la que os hablaré a continuación y que fue publicada en 1908, abordaba con valentía una narración que denunciaba la hipocresía de la sociedad y las diferencias entre clases tal y cómo se ve reflejado en «Una habitación con vistas».
La historia nos presenta a Lucy, una joven que sigue lo convencional, las normas y la típica moral inglesa de la época. Junto a su prima emprenderán un viaje a Florencia, allí se hospedarán en una pensión donde conocerán a varios ingleses. Entre ellos, los Emerson, padre e hijo criticados por sus ideales avanzados y su manera de mostrarse de cara a la sociedad. Nuestra protagonista, quedará embelesada a la par que fascinada con la diferente perspectiva que se abre ante sus ojos.
La obra tiene partes muy interesantes, su comienzo resulta encantador, una serie de diálogos amenos, una presentación excepcional de la ambientación y de los personajes y posee una crítica afilada y ridiculizante a los ideales de la época, realmente maravillosa. Pero en su segunda parte, situada ya en Inglaterra, la trama cobra un matiz distinto, más lento y que contiene situaciones inverosímiles y que nos brinda un final romántico que puede resultar absurdo, en desacuerdo con lo presentado con anterioridad.
Lo mejor de la novela sin duda son las reflexiones del personaje de Emerson en contrapunto con Cecil, en las que señala sin pudor la fe irracional y sobre todo muestra su rechazo hacia las ideas conservadoras hacia la mujer. Su modo de ver la vida, es una muestra de la incomodidad que sentía el autor, un claro mensaje de empoderamiento y liberación femenina.
En conclusión, y tras mucha reflexión, debo decir que la novela me ha gustado, ha sido un acierto leerla en este período lector en el que necesito historias cortas y que no supongan mucha dificultad lectora; pero, porque siempre hay un pero, siento que me ha decepcionado en algunos puntos que resultan cruciales para hacer de esta, una historia redonda.