Por fin me decido a leer este clásico.  

Poco puedo decir que no se haya dicho ya de esta obra de sobra conocida.
La primera obra escrita por Patrick Süskind en 1985, nos narra con una prosa exquisita y muy detallada a la hora de describir los olores y cada matiz, la vida de Jean-Baptiste Grenouille, un asesino serial un tanto peculiar y con una vida marcada por la desgracia desde el mismo momento que nace.
La ambientación y el inicio es brutal, te atrapan y no te sueltan.
La gente le teme porque no desprende ningún olor, al contrario de la vida de la época, calles que huelen a pis y excremento (todo esto se narra al detalle nada más empezar a leer las primeras líneas y me ha hecho poner cara de asco en múltiples ocasiones